"Todos quieren ser funcionarios para no trabajar"
 |
La diputada nacionalista Flora Marrero dejó la frase más polémica del debate cuando aseguró que en la actualidad "todo el mundo quiere ser funcionario para no trabajar", una reflexión que remató diciendo que "ser funcionario hoy en día en este país es un chollo". La política de CC reclamó un mayor control de los funcionarios y más exigencia en su productividad , al tiempo que aseguró que basta con acudir a cualquier administración pública para comprobar que "muchos funcionarios no están en sus puestos de trabajo". El ataque de Marrero a los trabajadores públicos indignó a los representantes de los sindicatos.
Luis Ladevezze, de CC OO, calificó esta expresión como "un insulto a los empleados públicos y al conjunto de los ciudadanos". Lamentó la "campaña de desprestigio de lo público iniciada por los políticos" y recalcó que "los funcionarios no son unos vagos". Jesús Caballero, de UGT, también censuró esta intervención y pidió que "no se demonice al empleado público".
Por su parte, Javier Abreu calificó la frase como "una irresponsabilidad mayúscula". El diputado Manuel Fernández (PP) quiso disculpar a Flora Marrero, que tuvo que abandonar el debate unos minutos antes de su finalización, por "su desafortunada frase". Fernández quiso "romper una lanza en favor de Marrero" y reinterpretó su polémica frase: "Lo que habrá querido decir es que todo el mundo quiere ser funcionario para tener garantizado un empleo". Tras esta "disculpa", reconoció que decir que "todos quieren ser funcionarios para no trabajar" es "un disparate".
Los representantes de CC y PP compartieron el punto de vista de que sobran funcionarios públicos en Canarias. UGT y CC OO rechazaron esta visión y remarcaron que los problemas son organizativos y de gestión. Ladevezze lamentó que "en muchos casos los funcionarios tienen que acatar órdenes de algunos personajillos que no tienen la más remota idea y están colocados ahí sólo por el reparto de cuotas de poder". También fue contundente al afirmar que "no sobran empleados públicos en la administración canaria, lo que ocurre es que están mal gestionados". Caballero también apostó por reducir el número de altos cargos y empresas públicas, "porque esas funciones pueden ser asumidas por los funcionarios". A su juicio, en Canarias existe "hiperinflación de altos cargos y gran cantidad de estructuras prescindibles, pero no sobra ni un empleado público".
No hay comentarios:
Publicar un comentario