miércoles, 7 de noviembre de 2012

Fi$cal Paradise

El mundo al revés: la policía griega ha detenido a un periodista por dar los nombres de 2.059 delincuentes. El periodista se llama Kostas Vaxevanis y los delincuentes son un buen montón de millonarios que guardan su dinero en Suiza para no pagar impuestos. Vaxevanis señala a los criminales y la policía le persigue a él, por “entrometerse en su intimidad”. Su caso demuestra a las claras una obviedad: que los paraísos fiscales no existirían sin la complicidad del resto de los Gobiernos occidentales. Es la UE, Estados Unidos y Japón quienes toleran que sus oligarquías financieras escapen al fisco. Son nuestros gobiernos los que permiten que Suiza, esa cueva de Alí Babá, sea un respetable socio de la comunidad internacional y no un Estado criminal, aislado y castigado comercialmente por todos sus vecinos. Es Occidente quien permite a sus bancos piratas abrir sucursales en nuestro suelo. Es Europa, que controla el cien por cien de la frontera suiza, la que permite a este refugio del dinero negro conectarse con el sistema financiero mundial. Suiza vive de estafarnos a los demás, pero no recibe castigo alguno porque son nuestros gobiernos y las élites financieras de nuestros países quienes se lucran de este negocio inmoral.
En la lista de Vaxevanis hay dos exministros conservadores griegos y un asesor de Antonis Samarás. Es solo una muestra, con seguridad son mucho más de tres los políticos griegos con dinero escondido en un paraíso fiscal. El periodista ha publicado la parte griega de un archivo mucho mayor, el que se llevó Hervé Falciani en 2007 del HSBC, que no es ni mucho menos el único banco de toda Suiza.
Falciani está hoy encarcelado en España, en la prisión de Valdemoro, detenido bajo la acusación de un delito que ni siquiera existe en nuestra legislación: revelar secretos bancarios. La contradicción es brutal: en España, si alguien tiene conocimiento de un delito fiscal, su deber es ponerlo en conocimiento de la justicia; por hacer precisamente eso, la justicia española lo mantiene hoy en prisión.
En breve, el Gobierno tendrá que decidir si lo extradita a Suiza o si –como piden el PSOE e IU–, lo pone en libertad. Gracias a Falciani, que entregó su valiosa información a Francia, España pudo recaudar 6.000 millones de euros defraudados por 659 personas, una lista que en España aún no es pública en su integridad.
Falciani se ha ofrecido a colaborar con España, ayudando a localizar a otros delincuentes españoles que esconden su dinero en Suiza para no pagar. ¿Aceptará el trato el Gobierno de Rajoy, ese mismo Gobierno que aprobó una amnistía fiscal y que negocia con Suiza otra fórmula similar? Prefiero no apostar.

Grecia congelará el salario mínimo durante cuatro años

  • El salario quedará fijado en 580 euros hasta 2016, 511 para los menores de 25 años
  • La edad de jubilación pasa de 65 a 67 años
  • Se iniciará el proceso para despedir a funcionarios
Manifestación convocada por los sindicatos
griegos en la huelga general. Foto: Efe
La congelación del salario mínimo durante cuatro años es una de las medidas de mayor impacto social dentro del nuevo plan de austeridad que el Parlamento griego tiene previsto aprobar en la noche del miércoles. La medida estará en vigor hasta 2016 y dejará el salario fijado en 580 euros al mes, y 511 para los menores de 25 años. En febrero de este año, el salario mínimo fue reducido en cerca de 200 euros.
En la tarde del miércoles, decenas de miles de personas se han concentrado en la plaza Syntagma de Atenas frente al Parlamento. Es la culminación de la huelga general de 48 horas que se inició el martes y que ha sido convocada por los dos mayores sindicatos del país.
El plan de austeridad, impuesto por la troika para que Grecia continúe recibiendo financiación de la UE y el FMI, vuelve a aumentar la edad de jubilación, que pasa de 65 a 67 años. En 2010 se amplió de 60 a 65 años. La ampliación entrará en vigor el 1 de enero, por lo que es probable que se produzca un aumento de jubilaciones en los dos últimos meses del año.
No se librarán de los recortes en las pensiones. Se reducirán en un 5% las que van de 1.000 a 1.500 euros mensuales, un 10% las que abonan entre 1.500 y 2.000, y un 15% las superiores a 2.000 euros.
Por primera vez, los denominados "salarios especiales" en el sector público sufrirán recortes significativos. Militares, policías, médicos y jueces cobrarán entre un 2% y un 30% menos en una amplia escala en la que los más perjudicados serán los jueces, con los sueldos más altos.
También habrá descensos salariales generalizados en las empresas públicas con recortes superiores al 30% y un salario máximo para los puestos más importantes de 1.900 euros al mes.
El plan de austeridad abre la puerta a los despidos en el sector público, motivo de frecuentes presiones por parte de la troika y de promesas del Gobierno griego que nunca llegaron a cumplirse. 2.000 funcionarios serán apartados de sus puestos y enviados a su casa. Durante un año, recibirán el 75% de su salario. So no se les encuentra otro puesto disponible, cosa poco probable, serán despedidos definitivamente. Cada tres meses, 6.250 funcionarios pasarán por el mismo proces, según informa el diario Ekathimerini.
La nueva legislación aprobará la desregularización de 14 profesiones, entre ellas las de abogados e ingenieros. Se pondrá en marcha la liberalización de horarios comerciales, que permitirá abrir los domingos.
El Gobierno cree que tendrá los votos necesarios para aprobar el plan de austeridad, aunque hay dudas sobre el número de diputados del Pasok que romperán la disciplina yo votarán contra el Gobierno. El tercer socio en el Gobierno de coalición, Izquierda Democrática, se opone a los nuevos recortes, pero ha aceptado abstenerse y no unir sus votos a los de la oposición.

Una carta de suicidio

"Cuanto más se analizan las implicaciones de lo que se pide a Grecia, más parece una carta de suicidio que un plan de recuperación", dice el periodista griego Nick Malkoutzis, director adjunto de la edición en inglés de Ekathimerini.
"Como caravanas de camellos que atraviesan el desierto con la esperanza de que su guía les conduzca a un lugar con agua, cada Gobierno ha presentado proyectos de ley en el Parlamento con legislación pactada con la troika y con la promesa de que serán la clave de la salvación. Cada vez que se han aprobado se ha dividido a la Cámara y la sociedad griegas, los fundamentos económicos se han deteriorado y los niveles de tolerancia de la sociedad se han visto erosionados. La esperanza de la caravana de encontrar el oasis se ha convertido en polvo".