jueves, 30 de junio de 2011

Inspección en abril; test en junio

SE CAE, HACE PERDER DOCUMENTOS, ES VULNERABLE... UN AUTÉNTICO DESASTRE


Resulta ciertamente llamativo que el Gobierno de Canarias emitiera el 8 de junio pasado un comunicado de prensa anunciando al mundo que su Atlante II había superado los test de compatibilidad exigidos por el Consejo General del Poder Judicial, un absurdo teórico que debió ahorrarse a la espera de que la inspección que ya se había realizado en abril, cuyos resultados conocemos ahora, certificara de manera oficial la validez del sistema. Salvo que lo que se pretendiera era despistar con ruido ambiental, no fuera a ocurrir lo que finalmente ha ocurrido, que Atlante no carbura. Y, para mayor escarnio, la constatación de las deficiencias de la aplicación se hace tras una inspección en la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife, donde el Gobierno, y más concretamente José Miguel Ruano, tiene a sus más contrastados valedores, algunos de los cuales han sido vistos estos últimos días en los pasillos del Parlamento de Canarias haciendo gala de esas magníficas relaciones. Si la inspección se trasladara a la provincia de Las Palmas, donde la simpatía no es tanta, seguramente aparecerían más deficiencias, como la vulnerabilidad constrastada del sistema, como los ataques sufridos -que se conozcan- por dos jueces de instrucción, por la clamorosa información que se facilita a los imputados con una simple solicitud y con la onerosa pérdida de documentos y expedientes que terminan perjudicando al justiciable y que sobrecargan de manera vergonzosa la ya de por sí saturada administración judicial. Ahora le toca al PSOE, como siempre, comerse el marrón y corregir lo que tiene poco remedio. No va a tirar a la basura un gasto de mas de 16 millones de euros tan alegremente. Pero podría investigar un poquitín. A ver.

Publicado en http://www.canariasahora.com/topsecret/ampliar/14979/

Atlante, en el punto de mira


EL CONSEJO GENERAL DEL PODER JUDICIAL DEJA COMO MENTIROSO AL CONSEJERO RUANO
Vamos a ver si entre todos encontramos la verdad, que para eso nos pagan. Desde hace muchos meses venimos denunciando en este periódico el descarado despilfarro del Gobierno de Canarias con los programas informáticos, concretamente con dos de ellos, el Sefcan, destinado a la Consejería de Economía y Hacienda, y el Atlante II, destinado a la Administración de Justicia. Ambos han supuesto para los contribuyentes canarios un gasto superior a los 37 millones de euros, repetimos, 37 millones de euros, y ambos vienen convirtiéndose en auténticas pesadillas para sus usuarios, los funcionarios, y para los ciudadanos, que a su vez sufren las consecuencias de los desastres informáticos por la inoperancia de esas aplicaciones. De Sefcan volveremos a ocuparnos pronto, que no deja de ser noticia ese despilfarro promovido por José Manuel Soria, el rey de los concursos millonarios con resultados desastrosos. Centrémonos hoy nuevamente en el Atlante II, porque el Consejo General del Poder Judicial ha concluido que es una auténtica calamidad. Así lo recogemos en nuestra edición de hoy en una noticia que deja como mentiroso al consejero de Presidencia en funciones, José Miguel Ruano, que llegó a emitir en su día un comunicado asegurando que el programa había superado los test del órgano de gobierno de los jueces, el mismo que ahora lo descalifica. Pudiera ocurrir, no lo negamos, que el CGPJ, en una evaluación teórica, se creyera las explicaciones técnicas sobre esta aplicación, pero en la primera ocasión en que ha podido hacer un test práctico, se ha tropezado con la dura realidad: Atlante es un paquete y nos ha costado a todos los canarios un ojo de la cara. Y la yema del otro.
Publicado en http://www.canariasahora.com/topsecret/ampliar/14977/