sábado, 3 de marzo de 2012

Los medios del Sistema comienzan la criminalización del movimiento

EL FANTASMA DE LA REVUELTA ESTUDIANTIL RECORRE LAS CALLES

Un fantasma recorre las calles del Estado español, inquietando y poniendo en alerta a los defensores del actual desorden social. Se trata del movimiento estudiantil, al muchos habían dado precipitadamente por muerto y que, no obstante, ha resurgido con inusitada intensidad en respuesta a los brutales recortes en materia de Educación que están aplicando tanto el Ejecutivo central como  los diversos gobiernos autonómicos.

La chispa que prendió la indignación de los jóvenes se inició en el País Valenciano, donde los estudiantes del IES Luis Vives empezaron a comprobar en sus propias carnes cuál es la verdadera esencia del llamado "Estado de derecho", tras atreverse a reclamar en las calles su derecho a recibir una educación pública digna y de calidad.  Pero las cargas policiales indiscriminadas ordenadas por el Gobierno del PP como aviso a navegantes contestatarios parecen haber provocado el efecto contrario al previsto por el partido de la ultraderecha española. La llama de la justificada rebeldía juvenil ha comenzado a extenderse, alimentada por las consecuencias más visibles de un sistema económico y político que no ofrece a las nuevas generaciones más futuro que la precariedad y la esclavitud salarial perpetuas, cuando no la simple pobreza y exclusión social.


Este miércoles 29 de febrero, miles de estudiantes universitarios y de secundaria volvían a tomar las calles de varias ciudades de España. Se celebraron manifestaciones y concentraciones en Barcelona, Girona, Valencia, Alicante, Madrid, Toledo, Ciudad Real, Albacete, Cuenca, Zaragoza, Teruel, Santiago de Compostela, La Coruña, Vigo, Ferrol, Sevilla y Málaga. Los jóvenes estudiantes rechazaron una vez más los recortes presupuestarios en Educación y se solidarizaron con sus compañeros de Valencia.
Comienza la criminalización del movimiento

Siguiendo un patrón tradicional en el tratamiento informativo de las protestas populares, los medios de comunicación del establishment han comenzado ya a pergeñar la criminalización del movimiento estudiantil. Una labor imprescindible para justificar ante la opinión pública su posterior represión por parte de los "cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado". Hace escasos días, la delegada del Gobierno en Valencia y el jefe de policía Antonio Moreno Piquer, que calificó a los estudiantes como "el enemigo", trataban de descargar de responsabilidad a sus subordinados "antidisturbios" refiriéndose a un supuesto grupo de "radicales antisistema" que habrían provocado los disturbios. Este miércoles, los medios estatales hacían lo propio para defender la carga de la policía contra los estudiantes barceloneses.  

     A buen seguro que en las próximas semanas y meses si el movimiento estudiantil logra consolidarse lo que no es por el momento más que una ofensiva mediática incipiente se convertirá en una campaña  de descrédito en toda regla perfectamente orquestada. Televisiones, radios y periódicos afines al PP y al PSOE se esforzarán para hacernos ver que, en efecto, los estudiantes antisistema son “el enemigo”.

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