Los indicadores
sociales de Canarias continúan empeorando
Intersindical
Canaria partidaria del cese delactual Gobierno
y la disolución del Parlamento
La aprobación parlamentaria del plan
de recortes sociales con los votos favorables del pacto de gobierno de
Coalición Canaria y el PSOE, aparte de los efectos demoledores que traerán
consigo y que recaerán sobre la ciudadanía en general y los empleados públicos
en particular, ha servido además para evidenciar la cobardía política del
actual ejecutivo en su reparto de papeles para mantener y aumentar el
sufrimiento de los canarios mediante la reiterada y abusiva política de
ajustes. Haciendo honor al dicho que “el peor tirano es el converso”, los
denominados socialistas canarios se han convertido en un remedo del Partido
Popular como baluartes de las agresiones al estado de bienestar tal como han
venido demostrando los miembros que el PSOE tiene en el actual gobierno.
A su vez Coalición Canaria, en contra de su inicial rechazo, ha aceptado
todas las directrices de Madrid en materia de recortes sociales, pero además, y
aparte de la deuda histórica de menor inversión por habitante, ha asumido el
trágala de los ochocientos millones que los presupuestos generales del Estado
han quitado a Canarias.
A los graves perjuicios que nos ocasiona
la política que desde España practica
el Partido Popular en su programa
de ciega obediencia a la desaforada campaña recaudatoria de los mercados
financieros, se une además la acción arbitraria y sin rumbo del ejecutivo
canario, con un presidente ególatra y de paja que es sostenido a duras penas
por un gobierno cuyas únicas claves de acción política ante la desvertebración
social de Canarias son el aumento de las cargas impositivas a la ciudadanía y
los recortes sociales, ello al más puro estilo totalitario. De ningún modo
puede estar en su cabales un presidente del gobierno que paralelamente al galopante
incremento de la pobreza y del paro que
se produce mes tras mes en Canarias, eleva esperpénticamente el número de
puestos de trabajado que promete crear en las islas.
A este negro panorama, Canarias
continua cayendo vertiginosamente en todos y cada uno de sus indicadores
sociales, entre otros muchos no solo acumulando el mayor número de parados,
sino además, aquellas otras personas disponiendo de un trabajo, perciben los
salarios más bajos en relación con España y el conjunto de la actual Comunidad
Europea. Pero además este Gobierno en su ámbito
competencial continúa destruyendo empleo público, frena drásticamente el
consumo mediante su política salarial e impositiva y desguaza los servicios
fundamentales como la sanidad y educación.
Junto a su inmovilismo, la
incapacidad del actual Gobierno y del Parlamento canario para gobernar y
legislar de forma acorde con la situación de extrema emergencia social que
sufre el Archipiélago, aconseja la dimisión del actual Ejecutivo y la
disolución de la Cámara autonómica.
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