miércoles, 6 de junio de 2012

El CES pide acompasar los ajustes presupuestarios ante los riesgos de exclusión

El presidente del Consejo Económico
y Social (CES), Marcos Peña
El Consejo Económico y Social (CES) ha recomendado este martes  "acompasar" los plazos para el cumplimiento de los ajustes presupuestarios, ya que el recorte en las políticas sociales hará de la exclusión severa uno de los problemas más serios de España a medio y largo plazo, incluso una vez superada la crisis.
A juicio de Marcos Peña, presidente de este órgano consultivo del Gobierno, la situación del país es "pavorosa", por lo que ha reclamado un "entendimiento político" entre los poderes públicos para repartir los "sacrificios" de forma equitativa, algo que por el momento no se está produciendo -a su juicio- "de ninguna manera".
En su Memoria de 2011, el CES recuerda que la incidencia de la exclusión severa en España es más baja que en países del entorno pero ha aumentado en el último año, especialmente en la población bajo el umbral de la pobreza, los jóvenes y los que viven de alquiler.
Pero el Consejo cree que se trata de un problema sobre todo a medio o largo plazo, en especial ante el desarrollo de políticas sociales en un contexto de ajustes presupuestarios.
Al respecto, y aún reconociendo la necesidad de la sostenibilidad fiscal, reclama acompasar los plazos comprometidos con Bruselas y que en el caso de España implican conseguir un déficit del 5,3 % del PIB para 2012 y un 3 % para 2013.
En particular, y dado que el gasto social absorbe un 74 % de los presupuestos autonómicos, recomienda que el ajuste en sanidad, educación y atención a la dependencia en las regiones sea "limitado" y "centrado en mejoras de eficiencia en la provisión de los servicios".
El CES recuerda que recortar en estos tres capítulos puede llevar a "cronificar" las desigualdades más allá de la crisis, en un país en el que uno de cada cuatro hogares está ya en riesgo de pobreza.
Además, la Memoria del CES hace hincapié en que el ajuste fiscal impuesto por el sobreendeudamiento y la necesidad de sanear el sector financiero en Europa está teniendo "consecuencias muy negativas" sobre la recuperación del crecimiento a corto plazo.
"El debilitamiento de la economía real, la fragilidad de las finanzas públicas y la vulnerabilidad del sector financiero parecen estar agravándose recíprocamente, dando lugar a un círculo vicioso", según el informe.
El CES, que recopila datos ya conocidos a través de diversas encuestas y estudios, resalta que a estas alturas la sociedad española ha adoptado cambios muy notorios en sus formas de vida, sus hábitos y sus costumbres, adaptándose de lleno a la máxima de la austeridad.
Así, las familias han optado por aplazar los grandes gastos, como vehículos o muebles, y disminuir los relativos a transporte u hostelería. Sólo han crecido de manera importante durante la crisis los recursos que se destinan a la adquisición de televisiones, que se han duplicado desde 2006.
El empeoramiento de las condiciones de vida de la población se traduce en hechos como que cada vez más ancianos no sólo han adoptado el rol de cuidadores, sino que sus pensiones se convierten en fuente principal de ingresos en un grupo cada vez mayor de hogares.
En el primer trimestre de 2012, había 422.600 hogares en los que la persona de referencia era un jubilado o pensionista, en convivencia con al menos una persona en paro, un 21,7 % más que un año antes.
En lo que se refiere a los jóvenes, la destrucción de empleo y el aumento del tiempo de permanencia en el paro provocan una caída progresiva de la intensidad de la búsqueda de trabajo.
El CES concluye que la pérdida de expectativas de futuro es un riesgo que está emergiendo y que no favorece la recuperación, "pues contradice la lógica del esfuerzo, la educación, la innovación y el emprendimiento que en condiciones normales deberían impulsar el crecimiento económico y la mejora intergeneracional de las condiciones de vida".

No hay comentarios: