Los trabajadores deberían pensarse mucho con votar al Partido Popular porque lo que quiere esta extrema derecha es cargarse el incipiente Estado de Bienestar. El problema de España es que el Partido Popular nunca ha sido un partido de derecha democrática, porque dentro tienen también a la extrema derecha representada por los Aznar, Botella, Mayor Oreja, Acebes, González Pons, Dolores de Cospedal, y otros cavernícolas peligrosos, muy peligrosos. La extrema derecha mediática se ha soltado todos los entresijos, y dispara a diestro y siniestro insultando a todos los que no piensan como ellos, los del pensamiento único y las victoriosas banderas al paso alegre de la paz, prietas las filas y firmes el ademán. La última cabronada de estos fascistas la ha escrito Luis María Ansón en “El Mundo”, felicitando a Jaime Mayor Oreja por haber visto hace tiempo la maniobra de Bildu, y calificando el muy cabrón a Rodríguez Zapatero “presidente por accidente”. Ahora con la legalización de Bildu, ya me extendí con este tema en mi última entrega, están dando el coñazo, insultando incluso al Tribunal Constitucional. A mí no me han gustado muchos fallos en los últimos tiempos de los jueces canarios, o en Canarias, y me tengo que fastidiar. Deshojando una margarita.
No dice Ansón que Mayor Oreja tiene varias empresas de seguritas y escoltas en Euskadi, que le rinde provechosos beneficios y que todo el mundo sabe que a los hermanos Mayor Oreja (Jaime, que es el gran jefe, José María, Carlos y Purificación, Puri para los amigos), no les interesa la desaparición de ETA porque eso reduciría o desaparecería la necesidad de escoltas para políticos, de seguritas para fábricas, edificios oficiales, etc, y es una pérdida grave en la cuenta de resultados de Eulen S.A, entre otras empresas especializadas para evitar atentados del Grupo Mayor Oreja. Sobre esto hay fallos en contra de los tales sicarios Mayor Oreja que denunciaron al PNV con una querella a cuenta de otra denuncia de los nacionalistas vascos por los negocios de “escoltas” de los Mayor Oreja, y la querella fue rechazada por la Audiencia Provincial de Álava en primera instancia dándole la razón al PNV, seguidamente por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, y finalmente por el Tribunal Supremo de España, a donde recurrieron en último intento los Mayor Oreja y también Mariano Rajoy que se solidarizó para “impresionar” al TS, y que fueron condenados incluso a pagar las costas de tales juicios. Toda la documentación la tengo en mi poder, así que Mariano, Jaime, estense quietitos cantando el cara al sol con Pepe Manué. Y dos piedras.
Luis María Ansón llega a decir en su artículo en “El Mundo”, que Rodríguez Zapatero “ha enriquecido a ETA”. Tal cual. Y a mi me dicen algunos amigos y el santero que va a ayudar a la Unión Deportiva a que no descienda a Segunda “B” que no sea muy extremista, pero les he dicho que hasta el 22 de mayo voy ¡a por ellos!, a por todas, porque en realidad una buena parte de los peperos son unos presuntos cabrones. Siguiendo con el hilo de la caverna mediática, el fascista peligroso Carlos Dávila, director de “La Gaceta”, un diario digital de extrema derecha, entre otras barbaridades afirma en su editorial del domingo pasado que “Zapatero se hizo con el poder tras la burda manipulación del 11-M”. Otra cabronada, por no decir otra cosa más gorda. Bueno, una “davilada”, porque la verdad es que el tal Carlos Dávila no escribe tan bien como Ansón, aunque este último sea escribiendo un cabrón. Y el tipejo de Carlos Dávila llega a afirmar al final de su artículo cosas como estas sobre Zapatero: “Queda únicamente como logro, sin duda, de su política el número de abortos conseguidos. Cifras aterradoras que chorrean sangre de inocentes criaturas asesinadas en el vientre de sus madres”. Y la guinda de este cabronazo. “Ya sé que Zapatero no cree en Dios. Ciertamente un concepto demasiado elevado para su neurona flatulenta”.
No estoy muy satisfecho con llamar cabronazo a Ansón y Dávila, porque es de malcriado, qué decíamos en La Isleta cuando eramos chicos, pero que conste que lo he dicho desde un punto de vista periodístico y con presunción. Todo para que no me den el coñazo con un juicio, pero advierto que ahora que estoy jubilado juego con ventaja y no me importaría sentarme en el banquillo de los acusados. Todo no va a ser para los “populares”. Hablando en serio, y escribiendo en serio, que ya me cuesta mucho, ojo con el PP, que está dispuesto a liquidar lo poco que tenemos de Estado de Bienestar, y están dispuestos a privatizar la Sanidad, la Educación, la Ley de Dependencia, las pocas residencias para la Tercera Edad, las guarderías infantiles, y piensan hasta cobrar en la playa de Las Canteras un euro a cada usuario para bajar a la arena. ¡Indignaos, indignaos!, que diría el filósofo francés Hessel, que con noventa y tres años ha escrito un líbrito advirtiendo a los jóvenes de los peligros que vienen con eso que ahora se llama “los mercados”. Hessel, entre otras cosas les dice: “Chicos, cuidado, hemos luchado por conseguir lo que tenéis, ahora os toca a vosotros defenderlo, mantenerlo y mejorarlo; no permitáis que os lo arrebaten”. Por lo menos que no recorten en Sanidad y Educación, pues si lo hicieran mejor sería irse para Cuba con libreta de racionamiento incluida, pero que con mi pensión española ya se pueden imaginar que viviría como un cura o un santero. Con un poco de disgusto por mi fanatismo por Las Canteras, pero al menos bailaríamos la salsa, y en guagua puedes llegar en veinte minutos a las fabulosas playas de La Habana, y a veces darte un salto a Varadero, y darte un homenaje de mariscada de langosta, langostinos, caribaneros cubanos, de vez en cuando, y de vez en vez, a veinte euros por cabeza, turística claro. ¡Qué rico, y pasando de todos estos mamones! Pepe Manué, no te ilusiones que no te voy a dejar aquí en mi querida Canarias sólo y haciendo faycanadas, gondoladas, eoladas, favoritivadas, salmonadas, y otras mariconadas políticas sin que te pueda controlar un poquito periodísticamente, con perdón, ya que una buena parte de la justicia canaria sólo ve burros volando por Anfi Tauro. Evidentemente hoy estoy cabreado, decepcionado y defraudado, pero no derrotado, palabras de mi admirado Iñaki Gabilondo, pero repito, hasta el 22 de mayo la extrema derecha del PP, unos cabronazos de tomo y lomo, se van a enterar que soy un auténtico cabrón políticamente hablando. ¿Vale el empate?, Y para terminar, mensaje especial a los jóvenes, ojo con el fascismo que viene sino mueven el culo.
Publicado en http://www.canariasahora.es/opinion/6968/
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