SORIA SE MARCHÓ DEJANDO UNA SANGRÍA CON EL VIEJO EDIFICIO DE UNELCO EN LA AVENIDA MARÍTIMA
El primer gran objetivo que captamos en este borrador de medidas de austeridad es reducir al menos en un 10% los gastos destinados a arrendamiento de inmuebles, es decir, alquileres de edificios y locales a porrillo por toda la Comunidad Autónoma para albergar servicios de toda índole. A esta materia se dedica el primer punto del plan de austeridad, donde destaca el propósito de "redistribuir los espacios físicos en los inmuebles propiedad del Gobierno de Canarias para que en los mismos se pueda albergar personal y recursos materiales de áreas que se encuentran en inmuebles arrendados". ¿Ha disminuido el número de áreas o de funcionarios? Pues no, lo que nos lleva directamente a la conclusión de que ha habido mucha alegría, demasiada alegría, en esto de arrendar locales, invertir en ellos miles y miles de euros para rehabilitarlos, y gastar dinerales en alquileres. ¿Quieren un ejemplo? Pues ahí les va: en plena crisis económica, en abril de 2008, Soria autorizó el pago de casi 56.000 euros al mes en concepto de alquiler de un solo local, las antiguas oficinas de Unelco en la Avenida Marítima de Las Palmas de Gran Canaria, después de aprobar también un gasto de al menos 2,2 millones de euros para su reforma y rehabilitación. Sólo en el alquiler de locales destinados a juzgados, el Gobierno de Canarias se gastó en 2009 cinco millones de euros. Mientras, el nuevo Palacio de Justicia de Las Palmas de Gran Canaria, cuya apertura se prometió para 2007, no se pondrá en marcha hasta 2011, y eso porque hay elecciones autonómicas. Al proceso de elección de esos locales, al poder que tiene la persona que los selecciona y a la titularidad de algunos de ellos habría que dedicar un monográfico.
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